Javier Franco, de 32 años de edad vive en la ciudad blanca de Colombia, Popayán (cauca). Desde muy pequeño sintió mucha curiosidad por este tipo de arte, cuando a sus 15 años tuvo contacto con algunos artistas musicales reconocidos como Marilyn Manson, quien para su época lucia imágenes grabadas en su piel con iconografía propia de su estilo musical y que de alguna manera influenciaron su inmersión dentro del mundo del arte corporal. Dicha curiosidad llevo a Javier a construir maquinas con sus propias manos de una manera un tanto ortodoxa y que llevaron a tatuarse una gran cantidad de motivos miniatura en su propio cuerpo. Esto generó un rechazo por parte de su familia quienes al comienzo no apoyaron su gusto por el tatuaje, pero esto nunca lo detuvo y siguió haciéndolo por muchos años hasta poder obtener maquinas profesionales diseñadas para la práctica. Muchos de sus amigos de adolescencia llevan tatuajes de Javier, ya que no solamente eran sus amigos, si no también sus cómplices. Estudio diseño gráfico en la universidad del cauca hasta 10 semestre, para dedicarse de lleno en la profesión de tatuador.
Durante toda su juventud y desde los 14 años tuvo cierta atracción por el arte de tatuar, pero siempre lo tomo como un hobbie y a pesar de que esta práctica le ayudo a pagar parte de sus estudios universitarios, nunca lo vio como un negocio. En el año 2012 después de tomar la decisión de dejar su carrera, comienza su carrera artística de una manera más profesional y con toda la seriedad del caso que esta profesión requiere. Javier franco es un tatuador que se ve influenciado por el estilo new school, pero además por el estilo neotradicional europeo, y así genera un estilo particular , con líneas muy precisas , degradados limpios de color y solides, pero que además puede lograr detalles de profundidad muy precisos.
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